La Selva Lacandona está ubicada en el estado de Chiapas, México. La región está poblada por el pueblo maya Lacandón, de ahí su nombre. Cobró notoriedad con la aparición del Ejército Zapatista de Liberación Nacional en 1994.
Contexto geográfico
Clima
La estación lluviosa bien definida, se presenta en verano y se extiende hasta parte del otoño. Existe también un porcentaje menor de lluvias invernales provocadas por masas de aire frío, provenientes del norte. De mayor importancia son las tormentas tropicales que se presentan en los meses de mayo a noviembre originadas en la zona del Caribe Occidental.
Las elevadas temperaturas y fuerte humedad presentes durante el ciclo anual, favorecen los procesos de alteración de minerales del suelo, así como la degradación de la abundante materia orgánica acumulada. Estos procesos, que dan origen a los suelos de la selva y que permiten un equilibrio, pueden ser fácilmente modificados cuando los desmontes sustituyen la vegetación natural, ya que disminuyen la cantidad de materia orgánica y se producen cambios en la circulación de agua en el perfil. Al remover la vegetación, el suelo sufre disminución de materia orgánica y cambios en la circulación de agua en el perfil, lo cual favorece la formación de plintita y el aumento de acidez.
La cubierta vegetal en la Selva Lacandona es altamente diversa a nivel de especies, comunidades y ecosistemas. En especial la Comunidad Lacandona muestra una de las extensiones más grandes en el país de selvas altas perennifolias, uno de los ecosistemas más complejos y diversos que se conocen, pero a la vez, uno de los más vulnerables y frágiles frente a la manipulación humana.
Por otro lado, este importante macizo selvático ofrece otros importantes "servicios ambientales" como la regulación hidrológica a nivel regional, el control de la erosión y el mantenimiento de la humedad de los suelos; algunos estudios recientes indican que esta cubierta vegetal es responsable en parte del ciclo de lluvias que precipita sobre la depresión central del estado. Una cuenca cerrada cuya única apertura por donde penetran las nubes que producen las lluvias, pasa sobre la Selva Lacandona. En la depresión central se ubica el sistema del Alto Grijalva, que genera más del 30% de la energía eléctrica del país.
Fauna
Laguna Miramar en la Selva Lacandona. Relieve
Laderas
Mesetas
La altitud de las mesetas varía desde menos de 500 m. sobre el nivel del mar, hasta más de 1 400 m. La formación de este relieve se debe a la disolución de las rocas de las crestas montañosas por infiltración que ocurre en una red de fisuras en estratos de inclinación débil. Lo anterior es favorecido por las condiciones de humedad, clima cálido y la abundancia de materia orgánica. El escurrimiento lento en la superficie de los parteaguas favorece la infiltración por grietas y fisuras provocando la formación de los valles.
Historia de la Comunidad Lacandona
Las etnias indígenas tzotziles y lacandones, en orden de importancia numérica, completan la población. En cuanto a los mayas lacandones, la población escasamente rebasa los 500 habitantes, que se encuentran asentados en cuatro localidades: Metzabok, Naha, Bethel y Lacanjá-Chansayab. En esta última se concentra la mayor parte.
Para 1984, el distrito de desarrollo de la SARH estimó una población de 4 935 habitantes para la comunidad de Nueva Palestina y 3 115 habitantes para Frontera Corozal. De acuerdo a cálculos estimados en 1989, se contempló una población de aproximadamente 6 400 y 5 000 habitantes, de la cual se tiene un 65% menor de 20 años y una PEA del 50%. Así es como se tienen 27 asentamientos dispersos en los márgenes de los ríos Usumacinta, Santo Domingo y Lacanjá, y 33 poblados en la zona de Las Cañadas, iniciando el proceso de obtener la legalización de la superficie colonizada.
La colonización regulada ha traído como consecuencia la pérdida de valores del grupo supuestamente beneficiado y un acelerado proceso de aculturación.
En la actualidad (2007) la zona se comunica por medio de la carretera fronteriza a la ciudad de Palenque y de ésta se desprenden ramales hacia los poblados.
La vivienda es de construcción rústica, predominando la madera en las paredes, pisos de tierra y techos de guano, el agotamiento de la palma de guano (Sabal spp., Arecaceae) ha inducido a que los techos de las viviendas lacandonas se estén construyendo con lámina galvanizada. También se cuenta con agua entubada, pero no cubre todos los barrios. La comunidad Lacanja-Chansayab cuenta hoy con suministro de energía eléctrica por lo que cuentan ya con una tortilleria, sistema satelital y servicio de Internet, que es ofrecido básicamente a los turistas que visitan la region.